Piden a Guatemala investigar represión contra caravana migrante

Unos 9.000 migrantes hondureños intentaron cruzar la frontera con Guatemala, pero fueron reprimidos violentamente por las fuerzas de seguridad de este país.

El Estado de Honduras exhortó al gobierno de Guatemala a investigar la represión ejercida por los cuerpos de seguridad de su país contra miles de hondureños que se movilizaron en una caravana migrante.

El 17 de enero los hondureños intentaron cruzar la frontera con Guatemala para llegar hasta Estados Unidos en busca de mejores oportunidades, pero fueron detenidos violentamente y obligados a retornar a su país.

Por ello, Honduras pide ahora que se investiguen y esclarezcan estos hechos, al tiempo en que llama a sus habitantes a no exponerse a los peligros que implica llegar a Estados Unidos de forma irregular.

La caravana migrante

Huyendo de la pobreza, la violencia y la devastación de dos huracanes recientes, unos 9 mil hondureños emprendieron entre el 13 y 14 de enero una caravana con destino a Estados Unidos.

Para llegar a dicho país necesitaban cruzar Guatemala y luego México, para así llegar finalmente al país norteamericano.

El 15 de enero llegaron al punto fronterizo de Florido, en Camotán, Guatemala. Unas 6 mil personas lograron cruzar este punto ante el débil cordón policial.

Sin embargo, los migrantes que continuaron su camino, fueron interceptados el domingo 17 por policías y militares muchos más armadas que formaron un cerco.

 

Los disparos de gas y el humo hicieron que miles retrocedieran en la carretera, mientras otros buscaban refugio en unas montañas colindantes.

Quienes insistieron en quebrar el cerco, fueron golpeados con palos, según las imágenes registradas en el momento que dieron la vuelta al mundo.

Aunque la mayoría de migrantes se vio obligado a retornar ante esta situación, al menos unos 1.500 hondureños continuaban atrapados en territorio guatemalteco hasta este miércoles 20 de enero.

Ellos buscaban llegar a Estados Unidos con la esperanza de que el gobierno de Joe Biden, quien asumió la presidencia el 20 de enero, flexibilice su política migratoria.

Piden investigación

Ante los hechos, las autoridades de Guatemala justificaron su uso de la fuerza contra las personas migrantes con medidas para frenar el peligro de contagio del coronavirus.

No obstante, la Cancillería de Honduras emitió un pronunciamiento el 17 de enero exhortando al gobierno de Guatemala a “investigar y esclarecer las acciones” de sus cuerpos de seguridad.

El 19 de enero el procurador de Derechos Humanos de Guatemala dio una entrevista en la que consideró “irracional e injustificable” la violencia con la que se disolvió la caravana de migrantes.

Por su parte, hasta el martes 20 de enero, el gobierno de Guatemala aseguró que más de 2.300 migrantes que integraban la caravana habían sido retornados a Honduras.

También indicó que viene brindando asistencia humanitaria a los migrantes, tales como entrega de alimentos y de transporte seguro para su retorno voluntario.

“Las fronteras siguen abiertas para los migrantes, pero siempre y cuando cumplan con los requisitos legales migratorios y sanitarios, especialmente una prueba negativa de la COVID-19”, dijo Rubén Téllez, ministro de Defensa de Guatemala.

Fuente: Servindi