Colectivo I Love Bullerengue: «es el grito, la voz de las comunidades que luchan por su reconocimiento»

El bullerengue, como expresión cultural nacida en la Costa Caribe de Colombia, ha ido expandiéndose progresivamente de manera más intensa a través de redes e iniciativas de colectivos. En este sentido, el colectivo «I Love Bullerengue» se genera a partir de la necesidad de profundizar su difusión y visibilización a escala global.

Para profundizar en esta temática RESUMEN, se contactó con Febe Merab, cantadora de Bullerengue e integrante del colectivo en Barranquilla (Colombia) y Viera Saavedra Contreras, integrante de la agrupación Flor de Guayaba y, también, de I Love Bullerengue.

El bullerengue en contexto

El bullerengue, en palabras de Merab, es, en la actualidad, «el baile cantado que más territorio abarca por muchas cosas que lo hacen especial y diferente a otras músicas«.

Pabla Flores, cantadora de Bullerengue de María La Baja | Fotografía extraída desde: historiasypunto.wordpress.com

Nacido al alero del proceso desarrollado durante la época colonial en América Latina, es un baile cantado traído por ancestros africanos que confluyeron en el territorio de la costa caribeña de Colombia.

En este proceso, «nacen los 16 bailes cantados y uno de ellos es el bullerengue». Así, el contexto de esclavitud y cimarronaje incrustan en su origen un canto ligado a la libertad y la resistencia de los pueblos.

Febe Merab

Febe Merab, cantadora de Bullerengue e integrante del colectivo en Barranquilla

Para Viera Saavedra, esta relación con su historia «genera muchas inquietudes, preguntas, ganas de saber y, sobre todo, esta energía que entrega el bullerengue es un viaje espiritual«.

Entendido como una práctica diaria, el bullerengue no solo se expresa en masivas convocatorias, sino que también «en la cocina, en las relaciones cotidianas, en los animales, plantas y frutas con las que conviven las cantadoras y cantadores«.

Así, el contexto del bullerengue contempla, también, una fuerte relación con la situación actual latinoamericana y, en su raíz, afrocolombiana.

En esta línea, Febe plantea que «en la actualidad es el grito, la voz de las comunidades que luchan por su reconocimiento. De las comunidades afrodescendientes, de los desplazados, de las mujeres«.

Es importante considerar, en este plano, el alto índice de personas desplazadas internamente en los territorios colombianos producto de los conflictos sociales y paramilitares.

Viera Saavedra Contreras

Viera Saavedra Contreras, integrante de la agrupación Flor de Guayaba y de I Love Bullerengue | Fotografía: Angela Pincheira

Así, el bullerengue significa, en palabras de Saavedra, «hablar de la vida cotidiana, de nuestros dolores, de sus dolores, de las penas, de las penas alegres como diría Petrona«.

La iniciativa: I Love Bullerengue

El colectivo «busca la difusión y visibilización del bullerengue a través de eventos y actividades académicas y divulgativas sin ningún afán económico«. De esta forma, el amor a la música tradicional se consolida como el motor de la iniciativa.

Con integrantes de Colombia, Panamá, Chile y Estados Unidos, se da un trabajo para con el bullerengue a escala continental, nutriendo y retroalimentándose experiencias y saberes desde una visión horizontal.

Para Viera, es fundamental el énfasis que se da en que el aprendizaje obtenido de maestras y maestros no quede en el olvido. «La expansión de sus historias individuales y colectivas, lo que dicen sus canciones, como el bullerengue influye«, yendo más allá de las fronteras colombianas.

Así, el no olvidar la raíz de resistencia, alegrías, penas cotidianidades se torna vital para el colectivo y, en general, dan la tónica a la expresión del bullerengue.

Con sonidos afrocolombianos, las historias – ocultas y/o de las y los desplazados – se posicionan en los espacios de forma transversal.

De igual manera, esta plataforma, se comprende como «un punto de apertura, generando mucho cambio en la forma de abordar, vivir y transmitir el bullerengue«.

En este sentido, las y los integrantes del colectivo, en términos de proyecciones de su trabajo, continúan elaborando actividades de difusión para que el bullerengue se riegue.

Desfile Bullerenguero en Cecoclí

Desfile Bullerenguero en Necocli | Fotografía: Viera Saavedra

Para esto, la conservación y transmisión de la cultura es fundamental. De esta forma, se torna vital la historia ligada a la raíz, buscando que esta «sea lo más apegada a la realidad para que la gente lo incorpore y podamos vivir y habitar como si estuviéramos allá [en Colombia]».

Como plataforma horizontal, I Love Bullerengue considera un espacio que busca, entre otras cosas, facilitar el acceso a la información y la expresión del bullerengue en relación a su difusión.

Encuentros como el de junio en Puerto Escondido, octubre en Necoclí y diciembre en María La Baja dan cuenta de la necesidad de generar estos espacios, donde la retroalimentación y transmisión de saberes tienen un papel fundamental.

 

El bullerengue en lo local

En el Gran Concepción, el bullerengue también ha encontrado asidero en agrupaciones y colectivos de trabajo.

Considerando la importancia que tiene la mantención de la raíz afrocolombiana, Viera Saavedra comenta que ha sido un proceso extenso, lento, pero, por sobre todo, profundo.

«Si bien el objetivo y el sentir bullerenguero es común, se manifiesta de distinta manera en las regiones«, tanto a escala latinoamericana como también local.

Taller de bullerengue

Taller de Bullerengue en Concepción junto a Ceferina Bánquez (Cantadora), Katiana Pestana (Bailadora de Montería) y Cara (Tamborero de Sincerín), 2018 | Fotografía: Viera Saavedra.

De esta forma, «acá nos genera ese impulso de hablar de las injusticias, de lo que nos está pasando en nuestros corazones con el sentipensar de los territorios» donde los conflictos socioambientales juegan un rol vital.

A modo de ejemplo, Flor de Guayaba ha incluido estos aspectos en su quehacer. Sus canciones «Mujer«, «No Me Voy a Callar» y «Yo Le Canto» dan cuenta de esto: un trabajo realizado a partir de la recopilación e investigación de la experiencia afrocolombiana y relacionado con los procesos históricos personales y colectivos de este lado de Latinoamérica.

Progresivamente se han ido acercando personas que necesitan y desean saber mucho más de esta expresión cultural, razón por la cual la creación de plataformas ha contribuido notablemente al ejercicio de aprendizaje enriquecedor a partir del bullerengue.

Un trabajo que, manteniendo su raíz afrocolombiana, trasciende las fronteras físicas.

Puedes seguir el trabajo de I Love Bullerengue en sus redes sociales, tanto en su fanpage de Facebook como también en su cuenta de instagram

Fuente: Resumen