Reconocimiento a trayectoria de periodista y activista Lucía Sepúlveda Ruiz: «cultivar las semillas de nuestras abuelas nos permite salir adelante»

En la edición XXIII del premio N’aitun otorgado por la Corporación de artistas Pro Ecología quienes realizaron una ceremonia en el Parque de la Escultura y el Paisaje N’aitun, ubicado en Punta de Tralca para otorgarle el reconocimiento a quienes han tenido una larga trayectoria en la defensa y promoción de la defensa ambiental o de derechos humanos.

La ceremonia realizada el 4 de diciembre tuvo por protagonistas al psiquiatra y escritor Luis Weinstein, en la categoría nacional; la bióloga y académica estadounidense Kathleen Whitlock en categoría internacional; la periodista y activista Lucía Sepúlveda en categoría comunicaciones; y la Agrupación de Cuidadores y Amigos de Postrados de El Quisco en categoría local.

Lucía Sepúlveda Ruiz, es periodista con una amplia trayectoria en la defensa y promoción de los derechos humanos, escribiendo importantes libros como «119 de nosotros», pero también con una relevante carrera en materia ambiental específicamente en la difusión de la semilla tradicional y nativa, en contra de su privatización, la utilización de transgénicos y la férrea oposición a Bayer-Monsanto. Desde la Red de Acción en Plaguicidas y sus Alternativas de América Latina (RAP-AL) se ha dedicado a difundir los mitos de la semilla genéticamente modificada, a realizar lobby parlamentario para frenar la firma del acuerdo UPOV 91, y se ha articulado e integrado diversas comisiones en el Movimiento por el Agua y los Territorios, red de organizaciones que se articula a nivel nacional para la desprivatización del agua.

Uno de sus mayores trabajos ha sido la lucha contra la firma del TPP-11 y el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea, difundiendo sus nefastas consecuencias para las semillas y la soberanía nacional.

En su largo y nutrido listado de premiados, resaltan figuras como José Mujica, Elicura Chihuailaf, María Olivia Monckeberg, Raúl Ruiz, Mónica González, Eduardo Galeano, entre otros.

Sepúlveda agradeció a la corporación por el reconocimiento y sostuvo que pese a que «no vivimos tiempos tan alegres» este gesto de entregarle un premio significaba que «todavía tenemos artistas, todavía tenemos vida, todavía tenemos semillas, todavía tenemos, aunque no tanta, agua». Y continuó, «por eso estamos acá y no nos rendimos».

La periodista y activista agregó que «vamos a seguir trabajando por la vida, aunque muchos no entiendan, aunque a cada rato aprueban tratados de libre comercio, que van a dejar con menos agua, porque nos van a impactar de una manera negativa, pero no a los que firman, a los de arriba, sino a los que estamos acá, a las lagartijas, a los insectos, es decir, eso es lo que nos empobrece y queremos territorios plenos».

Al cierre, Lucía Sepúlveda comentó que «cultivar la semilla de nuestras abuelas, eso fortalece nuestra alma, nuestra salud, y permite salir adelante aún en las condiciones en que estamos», y cerró que debemos «sentirnos hermanos y hermanas, de todo ser vivo y así tenemos que comportarnos, para que sigamos disfrutando y que la esperanza se mantenga».

Fuente: Gaceta Ambiental