Dada la falta de clases presenciales y a distancia, desde que se inició el cierre de los establecimientos a inicios del 2020, los profesores y profesoras se han focalizado en visitar a sus estudiantes en sus hogares, ya sea para conocer su estado socioemocional, entregar cajas de alimentos y guías de estudio.
Para conocer cómo los docentes de establecimientos rurales del país han abordado la pandemia, la Fundación 99 dio a conocer la “Encuesta Educación Rural en Chile hoy: Desafíos y Oportunidades que nos plantea la Pandemia por COVID-19”.
Se trata del gfaqq, desarrollado por Fundación 99 con el apoyo de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias del Ministerio de Agricultura y de la Coordinación Nacional de Educación Rural del Ministerio de Educación, además de la Agrupación de Profesores y Profesoras Rurales de Chile.
El informe, efectuado en agosto y septiembre de 2020, recoge la perspectiva de 1.730 encuestados que se desempeñan en contexto de ruralidad. La muestra representa un 7% de la dotación completa de docentes rurales, pertenecientes a las 16 regiones del país.
Gonzalo Plaza, Director Ejecutivo de Fundación 99, afirma que el estudio evidencia que un tercio de las escuelas no ha tenido clases desde que se cerraron los establecimientos y que el 80% de los profesores no tiene formación en educación rural multigrado, escuelas con estudiantes de diversas edades en una misma sala de clases: “El documento evidencia un incremento de la brecha educacional entre la ruralidad y las ciudades urbanas, la que se acrecentó dada la compleja crisis sanitaria. El problema va a seguir aumentando si no somos capaces de hacernos cargo de las ruralidades, un ámbito que siempre ha estado invisibilizado”.
Principales conclusiones
El reporte plantea que el 34% de los docentes de escuelas rurales no ha podido cumplir con sus funciones, ni presencial ni online, desde que se inició el cierre de los establecimientos a inicios del 2020.
Sobresale también la alta vocación dedicada y la escasa formación docente: El 79% que trabaja en educación rural no ha recibido ningún tipo de estudio orientado a la educación multigrado, siendo el tipo de escuela que congrega a más alumnos rurales, con más de 35.000 matriculados.
En ese sentido, hay una diferencia significativa en las proporciones de género. Específicamente, 82% de docentes mujeres y 73% de los hombres declara no haberse capacitado durante su formación inicial para trabajar en educación multigrado. A su vez, las mujeres que sí lo han recibido llegan al 18% y hombres al 27%.
Además, el 72% de los docentes declara que su carga laboral aumentó en 2020. En este aspecto, el alza para las mujeres asciende a 74% y para los hombres llega al 66%. Las acciones más frecuentes son ir a dejar guías de forma presencial a las casas de los estudiantes, realizar visitas de apoyo socioemocional o entregar canastas de alimentos, siendo ésta última la actividad más habitual por un 65% de los encuestados.
En cuanto al ejercicio educativo, 94% de los docentes cree que este año los alumnos aprenderán menos que en un año normal, pero que sí han logrado un mayor su grado de autonomía, habilidades relacionada a las tecnologías y comunicación, creatividad y herramientas socioemocionales.
Jorge Poblete, subsecretario de Educación, afirma que “desde el Ministerio apoyamos la educación rural durante todo el año con iniciativas como el plan Aprendo en Casa que entregó material físico para la educación a distancia a 3.800 escuelas; cápsulas educativas radiales; canal de televisión TV Educa, entre otros. Paralelamente, trabajamos en un plan de conectividad para conectar a internet a todas las escuelas de Chile”.
En cuanto a la mirada de futuro, explica que nada reemplaza las clases presenciales, y por eso es muy importante que los niños puedan volver a sus escuelas si están dadas las condiciones sanitarias.
En su cabalidad, el informe aborda diversos ámbitos de estudio: estrategias de enseñanza, expectativas en torno al aprendizaje de estudiantes, recursos tecnológicos, de apoyo pedagógico, capacitación y problemáticas socioemocionales como consecuencia de la pandemia. En este último ámbito, los docentes reportan experimentar algún problema que podría dificultar su desempeño laboral, como agobio laboral, ansiedad por no contar con los medios adecuados, dificultad para concentrarse, cambio de los hábitos alimenticios, dificultades para organizar sus trabajos e, incluso, trastornos del sueño.
El documento completo de la “Encuesta Educación Rural en Chile hoy: Desafíos y Oportunidades que nos plantea la Pandemia por COVID-19” se encuentra disponible en https://fundacion99.org/
Fuente: Fundación 99