El control territorial de las comunidades mapuche del Lago Maihue para defenderse del COVID-19

La organización autónoma y autogestionada de las comunidades mapuche williche del Lago Maihue, ha sido clave para evitar el ingreso del COVID-19 a su territorio, tanto es así que, al día de hoy mantienen cero contagiados, cumpliéndose 44 días desde la instalación de una barrera sanitaria instalada por las comunidades de Maihue y Rupumeica, que tiene como objetivo, sanitizar, concientizar a sus vecinos y evitar el ingreso de turistas y personas ajenas a su territorio, ubicado en la zona cordillerana de la región de Los Ríos.

En el día de ayer Canal 13, le dedicó un reportaje al ejercicio de control territorial desarrollado por la comunidad de Maihue, mostrando las acciones de control que realizan (sanitización y barrera social), además de la preocupación y demandas de las comunidades cordilleranas en el contexto de la Pandemia.

Según datos de la Seremi de Salud, en la región de Los Ríos se registran 199 casos, de los cuales 5 corresponden a la comuna de Futrono y 2, a la comuna de Lago Ranco; comunas de las cuales, las comunidades huilliches de Curriñe, Maihue y Rupumeica dependen administrativamente.

Esta situación tiene preocupadas a las familias del territorio puelwillimapu, ya que dentro de las comunidades existe una gran cantidad de adultos mayores que corren peligro de contagiarse. Por la misma razón, los/as organizadores(as) de la barrera sanitaria, “han hecho gestiones ante autoridades de nivel comunal y regional para que autoricen el traslado de una caja pagadora del IPS hasta Maihue, y así evitar exponer innecesariamente a los adultos mayores, pero la solicitud aún no tiene respuesta”, según consigna el portal Diario Futrono.

Oscar Quintul, vocero de la comunidad de Maihue, explicó que “A los turistas que tratan de venir al lago, los controlamos y les decimos que no son tiempos para andar paseando, mandándolos de regreso a sus casas”, agregando que “Nuestra gente teme viajar en bus y realizar trámites en Futrono (distante a mas de 1 hora), pues se pueden contagiar y después contagiar a sus familias, esto lo hacemos para evitar una tragedia mayor”, comentó refiriéndose al ejercicio de control territorial que han venido desarrollando.

Falta de apoyo institucional

Sin embargo, no todo ha sido fácil para la mantención de la barrera sanitaria en la bellísima zona del Lago Maihue, pues algunas de las comunidades que comenzaron hace más de un mes con la contención comunitaria al COVID-19, han tenido que replegarse, como es el caso de la comunidad mapuche Curriñe, que hace pocos días levantó el control que venía realizando, principalmente por falta de apoyo institucional.

En este caso porque la Municipalidad de Futrono, a fines de abril anunció el reinicio de trabajos de vialidad en el sector, lo cual significará la entrada de personas foráneas a la zona, según advierten los/as voluntarios que, hasta hace unos días, mantenían el primer escudo sanitario en el sector de Curriñe.

Los habitantes de Curriñe decidieron retirarse de la barrera sanitaria que tenían en el acceso al su sector, por temor a contagiarse, cuestionando que, en lugar de brindar apoyo, la Municipalidad de Futrono priorizó la ejecución de trabajos de vialidad, lo que consideran un tremendo peligro para las familias cordilleranas, por el ingreso de maquinarias y trabajadores provenientes de ciudades criticas que ingresarán a su sector.

Marcos Catrilef, vocero de la barrera sanitaria de Curriñe, relató que “se hizo una reunión el día 27 de abril pasado, con muy baja participación (5 o 6 personas, de 1500 habitantes que tiene la comunidad), donde los representantes del municipio dijeron que no nos podíamos oponer a que ellos trabajen en la zona”, comentó Catrilef, manifestando que “Sentimos que existió una manipulación de parte del municipio; porque las pocas personas que asistieron a esa reunión, decidieron por todo un territorio. Además, la gente del municipio, tampoco dio el espacio para escuchar otras alternativas, por el contrario, se buscó imponer una decisión sin medir riesgos”, sostuvo Marcos Catrilef, vocero de la barrera sanitaria de Curriñe.

Lo que consideran una imposición de parte del municipio futronino, se expresa en que “En esta reunión tampoco participaron las comunidades vecinas de Maihue y Hueinahue, considerando que la decisión de levantar una barrera sanitaria, los puede afectar directamente a ellos, ya que nosotros éramos el primer escudo en el camino de ingreso al lago Maihue y ahora nos tuvimos que retirar”, agregó Catrilef.

A través de un comunicado público difundido en las redes sociales, los vecinos organizados de Curriñe, responsabilizaron al “sr Claudio lavado, alcalde de la comuna de Futrono, concejales y autoridades, no nos han brindado el apoyo que corresponde y menos se interesan por cuidar nuestra comunidad realmente”. (…) “Por lo mismo queremos dejar en claro que cuando exista la enfermedad entre nosotros, serán los únicos responsables de la situación”, sostiene el texto.

Dentro de las obras en ejecución que busca desarrollar la municipalidad de Futrono, se encuentra el asfalto Río Blanco a Maqueo donde se incluyó el asfalto hacia la posta de Maihue, obras de ampliación y mejoramiento de APR Curriñe – Chabranco, nuevo cuartel de bomberos y Centro artesanal. Es de esperar que la ejecución de dichas obras, no ponga en riesgo la salud de las comunidades mapuche huilliche del territorio Puelwillimapu.

Fuente: Revista Territorio Sur